Hay quien vende su alma al diablo, incluso por Internet, para diversos menesteres, como triunfar, la eterna juventud, ser rico o lograrse distintos favores. Está claro que se puede vender todo, incluso la vida.
Eso es lo que pretende Ian Usher, un británico de 44 años afincado en Australia, quien, a causa de un desengaño amoroso, ha decidido terminar con su vida. Como él explica en su página, "no ha pensado en el suicidio" y sólo quiere acabar con todo lo que le recuerde al que fue el gran amor de su vida y poner a la venta todo lo que tiene y es.
Así a través del portal de subastas Ebay, todo el que lo desee se podrá hacer con la vida de Ian, que según describe en su web (http://www.alife4sale.com/index.htm), no estaba nada mal. La puja termina el 29 de junio y por el momento la vida de este británico vale más de 400.000 euros. Quien gane la subasta podrá vivir en una lujosa mansión en Perth, conducir su coche y sus motos, una de ellas acuática, e incluso tomarse unas copas con sus amigos, a los que también ha metido en el lote.
Con el dinero que obtenga, Ian comprará una nueva vida que comenzará el domingo, cuando atraviese la puerta con tan sólo su cartera, que irá repleta, y su pasaporte y que, por el momento, no tiene destino.
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